Hoy toca el turno al rebozo mexicano, aquí te cuento cómo y dónde se produce y porqué deberíamos rescatarlo antes de que se extinga. Aunque esta a la vista de todos, el rebozo guarda muchos secretos y aquí están todos.
En mi memoria tengo la imagen de mi abuelita que usaba rebozo para protegerse del frio invernal, ese rebozo que era milimétricamente delgado era todo lo que usaba.
Debo admitir que ya no hacen las mujeres como antes, pues yo no sería capaz de sobrevivir ni al frio ni del verano con un simple rebozo.
El segundo recuerdo en mi memoria relacionado con el rebozo es una canción de Cri-Cri que escuchaba de niña y que por alguna razón me encantaba (o creo que todas las canciones de Cri-Cri me encantaban) y que dice:
El rebozo es una de las tantas cosas que me acostumbré a ver en mi vida diaria, que nunca me puse a pensar si era una prenda “mexicana” o no.
Simplemente daba por hecho que el rebozo existía.
Y si bien es una prenda muy arraigada en la cultura mexicana, su origen no es del todo claro, lo que sí se sabe es que durante la colonia ya era una prenda muy popular.
¿Qué es un rebozo?
Es una especie de capa o manto de diversos colores, materiales y estampados.
El rebozo tiene viene de la mezcla del “mamatl” prehispánico con los materiales que empezaron a llegar tanto de Europa como Asia durante la época de la colonia.
Es de forma rectangular y está hecho de una sola pieza con nudos de hilo en ambos extremos.
Tanto el diseño de los estampados como los colores varían dependiendo de la zona donde éste se fabrica.
El material puede ser desde la seda natural, seda artificial (llamada artisela), hasta lana o algodón.
El rebozo fue una pieza clave usada por las mujeres durante la revolución mexicana, y al triunfo de ésta, el rebozo ganó más popularidad.
El rebozo mexicano hoy
Sin importar el origen del rebozo, me quiero enfocar en el presente del rebozo mexicano.
Y si bien, la primera función del rebozo es como prenda de vestir femenina, más exactamente para protegernos del frio, no es la única.
La otra función del rebozo es para cargar a tu bebé, en este sentido, el rebozo deja de ser una prenda femenina, para ser una herramienta de parentalidad.
Y si no me creen pueden consultar con la escuela Portea México que ha rescatado el rebozo mexicano y lo está impulsando tanto a nivel nacional como internacional.
Esta no es la única escuela que promueve el uso del rebozo tanto para dar masajes a las futuras mamás como para ayudarlas a cargar al bebé.
Según los expertos, cargar al bebé con un rebozo aumenta la autoestima del bebé, mientras permite que el padre o porteador tenga las manos libres.
Futuras tías o abuelas, ¡ya encontraron ese el regalo único e irrepetible que estaban buscando!
¿Cómo se hace un rebozo?
Un rebozo mexicano puede fabricarse usando un telar de cintura o un telar de pedal y su fabricación puede llevar desde una semana hasta un mes.
El telar de cintura es la misma técnica que usaban las culturas prehispánicas y solo se puede tejer uno a la vez, por lo que cada rebozo es una genuina e irrepetible obra de arte.
El telar de pedal fue adoptado durante la conquista, si bien el tiempo de preparación del montaje es mayor, al final pueden fabricarse hasta 20 o 30 rebozos en un solo montaje.
Estos rebozos aún siguen siendo obra de arte, pues son fabricados a mano, y la probabilidad de que vayas a una fiesta y encuentres a otra mujer usando el mismo rebozo es infinitamente menor a la ropa que todos usamos todos los días.
¿Dónde se fabrican el rebozo mexicano?
La producción de rebozos se da prácticamente en toda la república, sin embargo, esta actividad es poco redituable y los artesanos están migrando hacia otras actividades por razones económicas.
Sin embargo, los lugares que listo a continuación, aún conservan la producción del rebozo de forma relativamente exitosa.
- Santa María del Río, SLP: Tiene una tradición en fabricación de rebozos usando la técnica de telar de cintura que tiene casi 260 años de antigüedad. Se hizo famoso por sus creaciones en seda natural y seda artificial llamada “artisela”
- Zamora, Tangancícuaro, Jiquilpan y La Piedad Michocán, son 4 poblaciones que se dedican a hacer rebozos usando la técnica de telar de pedal, usan materiales como la seda, o mezclas como algodón con trama de artisela o algodón con trama de hilo metálico. Zamora también es famoso por sus rebosos de “puntas tiesas” que son muy apreciados por las mujeres purépechas de la región
- Moroleón y Uriangato, Guanajuato. Producen rebozos de algodón, que son más baratos por que la hebra de hilo es más gruesa lo que hace que su empuntado sea más fácil. Curiosamente, mucha de la producción de estos poblados se vede en el estado de Oaxaca
- Tenancingo, Tenango y Tejupilco EDOMEX que se dedican a hacer rebozos de algodón
- Tepexi de la seda y Tepeji del Río en Puebla
- Chilapa, Guerrero
- Oaxaca, Oaxaca
Últimas palabras
La mayoría de los rebozos que se producen al día de hoy en México son hechos por artesanos que siendo honestas son maestros en el arte de hacer rebozos, pero no en el arte de los negocios.
No esperemos a que venga una “diva de Hollywood” usando un rebozo para que entonces todas corramos a comprar uno solo porque esta de moda o se ve “cool”.
Aprendamos a valorar las cosas que nos ofrece nuestro gran legado cultural como las verdaderas obras de arte que son.
Ya sea que las usemos para cubrirnos del frío, para cargar a nuestro bebé o como accesorio un rebozo nunca esta de más.
Ya que estás aquí tal vez te interese conocer más sobre el guacamole o la flor de nochebuena, ambas cosas tan comunes en México están partiendo plaza en otros países.
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