Aquí te presento puntos a considerar cuando estás decidiendo si aceptas o no una oferta de trabajo en el extranjero, hay puntos del ámbito personal y laboral.
De forma que el aceptar esta oferta de trabajo en el extranjero sea un parte aguas positivo para tu vida profesional y tu desarrollo personal.
Si bien es cierto, que el desarrollo profesional tendrá mucho peso en tu decisión, es importante que tengas presente qué aspectos de tu vida personal se verán afectados y en base a eso tomes la decisión que te haga más feliz.
#1. Acomodo de tu familia
Si viajas con tu familia – esposo(a) e hijos – toma en consideración que implicaciones tendrá para ellos el cambio de escuela y medio ambiente en general.
Esto también aplica si es una asignación donde viajarás solo(a) y tu familia permanecerá en tu ciudad de origen.
Haz que tu familia participe de forma activa, investiguen las costumbres y condiciones de vida del país destino y revísenlos en familia, vean que cosas son diferentes (para bien y para mal) y pregúntense si están dispuestos a vivir bajo esas nuevas condiciones.
Tristemente, he visto a gente “sufrir” durante su estancia en el extranjero debido a problemas de adaptación con su familia.
#2. Shock Cultural
El shock cultural se da cuando experimentas sentimientos de frustración y ansiedad ocasionados por vivir bajo otras normas y costumbres, y eso es totalmente normal.
“Toda la gente es igual, es solo sus hábitos los que son tan diferentes”- Confucio.
Te puede ayudar el investigar sobre los usos y costumbres del país donde vivirás antes de llegar, sin embargo es algo que invariablemente experimentarás una vez que llegues.
Recomiendo vivir con la premisa de:
“a la tierra que fueres, haz lo que vieres”
Trata de adoptar una postura de flexibilidad y curiosidad, la primera para adaptarte a tu nueva realidad y la segunda para entender la vida desde “otro” punto de vista.
A la larga, lo que aprendas de tu nuevo entrono, tanto laboral como personal, será uno de tus principales ventajas cuando regreses a México.
#3. Idioma
Es muy posible que tengas problemas de comunicación debido a vocabulario, acentos y modismos del idioma, no importa que tan bien lo hables.
Veamos estos escenarios:
#1. Te mudas a un país donde también hablan español, y descubres palabras que nunca habías escuchado, y las que siempre usas ahora tienen otro significado.
#2. Te mudas a un país donde hablan un idioma que tú hablas, pero donde hay muchas personas de diferentes nacionales.
Ejemplo: Hablas inglés y te vas a Londres, ahí trabajas con un hindú, un francés y un sudafricano. Todos hablan inglés, pero con diferente acento al que deberás adaptarte.
#3. Aceptas un trabajo donde el idioma oficial de trabajo es “x”, pero el idioma oficial del país es “y” y tú no lo hablas.
Ejemplo: Trabajas en Dubai, todos hablan inglés en la oficina, pero el idioma oficial es árabe, por lo tanto ir a la tienda o un restaurante se convierten en toda una aventura.
En este caso te recomiendo aprender las frases mínimas para sobrevivir según la situación en la que te encuentres. Trata de aprender el idioma tanto como puedas.
Aprender idiomas tiene muchas ventajas, desde que previene el envejecimiento de nuestro cerebro hasta que nos puede ayudar en un trabajo futuro, sin olvidar la paz que sentirás cuando vayas a comer a un restaurante local y seas capaz de pedir la comida que tu querías.
#4. Te perderás eventos importantes
Prepárate mentalmente para perder algunos eventos personales importantes.
Desde la noche mexicana del grito de independencia hasta la boda de tu prima, pasando por la comida del 10 de mayo o el día del padre, cumpleaños (incluyendo el tuyo) y funerales (tocamos madera).
El internet hoy en día es nuestro mejor aliado. Si bien no podemos estar físicamente con las personas que amamos, la facilidad de tener largas conversaciones por teléfono, video llamadas o enviar fotos nos ayudarán a seguir en contacto y compartir los eventos importantes.
#5. Soledad
En general, los mexicanos somos altamente sociables y la soledad puede ser uno de los principales problemas a superar.
Si bien, en México además de la familia tenemos muchos grupos de amigos, es decir los amigos de la oficina, de trabajos anteriores, de la universidad y muchos otros.
Si te vas a trabajar al extranjero solo tendrás a los “compañeros de la oficina”.
OJO: No dije amigos de la oficina, pues algunas personas no les gusta socializar con compañeros de la oficina.
Y si a eso le sumas que no hablas muy bien el idioma local, esto puede hacer que a la larga te sientas solo, aislado y deprimido.
Deberás usar toda tu “gracia y otra cosita” (como dice la canción de la bamba) para conocer gente nueva, algunos de ellos con el tiempo serán amigos entrañables.
Busca grupos según tus pasatiempos o intereses e intégrate a ellos
- ¿eres una persona creyente? Únete a las actividades de la iglesia local
- ¿eres bueno para el fútbol? Únete a una liga local.
- ¿te gusta bailar? Busca un club de danza.
#6. Condiciones de vida
Las condiciones de tu futuro trabajo en el extranjero y las circunstancias del día a día en el nuevo país deberán ser mejores a las que tienes actualmente.
Y esto parecería un chiste cuando vemos las noticias en México y parece que no podría haber nada peor, y sin embargo lo hay.
Piensa que tus nuevas condiciones de vida incluyen un nuevo clima, la seguridad e incluso racismo.
Investiga las condiciones de vida y las implicaciones que tendrá para ti, por ejemplo, si te vas a vivir a un país musulmán y eres mujer, tal vez tengas que cubrir tu cabeza. Si te vas a vivir a Canadá vivirás entre nieve una gran temporada del año.
Mi mamá siempre decía, que a todo se acostumbra uno, menos a no comer, así que solo te pido tener las condiciones de vida presentes para tomar la mejor decisión.
#7. Extrañarás la comida mexicana
Uno de los aspectos al que todos los mexicanos estamos muy arraigados es nuestra diversidad culinaria y el basto número de ingredientes que podemos degustar en cada uno de los platillos típicos de cada región.
No por nada la comida mexicana ha sido declarada patrimonio cultural intangible de la humanidad.
De aquí se desprenden ciertas interrogantes que podríamos hacernos al respecto:
- ¿habrá tacos en el país a donde me dirijo?
- ¿encontrare chiles?
- ¿habrá restaurantes de comida mexicana?
Para tu consideración, en algunos de los países o en la gran mayoría existen restaurantes de comida “típica” mexicana. En la gran mayoría se trata de imitar el sabor a través de ingredientes locales y con los que algunas veces se logra tener una gran semejanza a los reales sabores mexicanos, sin embargo, en algunas veces tendrás que conformarte con sabores Tex-Mex.
Prepárate a una vida donde el aguacate, limones, y crema ácida serán artículos de lujo. Desayunar tamales o comer tacos al pastor, de eso ya ni hablamos.
Mi sugerencia es que aprendas a disfrutar y cocinar la comida local, siempre podrás visitar ocasionalmente los restaurantes de comida mexicana que hay en todo el mundo… nada más para quitarte el antojo.
#8. Puntos financieros
El costo de comida, renta y diversión son solo el inicio.
Boletos de avión, menaje, impuestos, atención médica, visa y permiso de trabajo son también parte del costo de trabajar en el extranjero. ¿Quién va a cubrir esos gastos?
¿Tienes departamento, carro, muebles, etc.? Tienes que decidir qué vas a hacer con ellos: Venderlos, regalarlos, almacenarlos en una bodega, guardarlos en casa de tus padres. ¿Qué costo implica todo esto?.
Mi recomendación es que, si vas a aceptar una oferta de trabajo, te asegures de que el sueldo o las condiciones de trabajo que te proponen cubran estos gastos.
No se trata de convertir el sueldo propuesto por el tipo de cambio, y compararlo con tu costo de vida actual.
Debes investigar el costo de vida en el lugar donde vivirás así como el promedio del salario para asegurarte que estarás dentro de las condiciones del mercado.
#9. Trabajo después del trabajo
Los trabajos en el extranjero regularmente son a corto plazo, y no hay garantía que la empresa tenga otra posición igual o mejor a largo plazo.
También puede pasar que mientras estés en una asignación en el extranjero se abran posiciones que hubieran significado una buena oportunidad para ti, en tu ciudad local.
El trabajo que estás por aceptar, deberá darte experiencia y habilidades que puedas “transferir” a otras áreas de la empresa (u otras empresas) de forma que vayas forjando tu futuro profesional.
Últimas palabras
Trabajar en el extranjero es como un arma de dos filos, por un lado, tenemos la emoción de un nuevo reto profesional y personal, y lo que tal vez pueda representar un gran avance para tu carreta profesional.
Por otro lado tenemos los 9 puntos que te presente anteriormente, que no pretenden desanimarte de ti intención de trabajar en el extranjero, sino por el contrario, tienen la intención que pienses en todos los puntos para que tomes la mejor decisión.
Recuerda:
“Abre tu mente y tus sentidos a disfrutar de lo nuevo, pero, sobre todo, aprende a adaptarte”.
